lunes, 28 de septiembre de 2009

Día de escalada.

El sábado en el taller con los peques de CODENI vimos algunas de las fotos que habían sacado hasta ahora para corregir detalles y trabajamos sobre la elección de una persona y el acercamiento para hacer un reportaje fotográfico, vamos a ver que traen para la semana que viene. Me parece que vamos muy rápido para ellos, la organización esta muy ansiosa con la muestra y la posibilidad de generar recursos a través de la venta de las fotos de los chicos, y como cuando yo vine el taller ya estaba en marcha no puedo decir mucho.
Después del taller de CODENI dormí toda la tarde, venía muy cansada de la playa y el viernes me acosté tarde, así que necesitaba recuperar energías.
Después de la siesta salí a caminar un rato, volví a comer, editar fotos y acostarme temprano porque el domingo me iba a escalar a las 8 de la mañana al Diente.
El Diente es una formación como a una hora de la ciudad cruzando un pueblo llamado Río Blanco donde hay muchas rutas de escalada. Ismael es profe de escalada en un gimnasio y va todos los fines de semana, este domingo había organizado para ir temprano con un alumno suyo que tenía ganas de llevar a su hija de 5 años y ahí me prendí yo.
Al final arrancamos un poco más tarde de lo programado y entre pasar a comprar comida y todo cuando llegamos al Diente las rutas que podía subir Sofía (la hija de Héctor, quien nos llevo) estaban ocupadas, así que Sofí no pudo escalar y medio que se emboló.
El lugar es muy lindo, se puede acampar, aunque me dijeron que no es muy seguro y conviene ir en grupos grandes para quedarse cerca de la entrada. Yo no escale mucho en la primer subida me dio un poco de miedo, creo que es hasta conocer el grupo, Ismael me daba seguro, me pareció que estaba distraído y me dio mucha inseguridad así que bajé.
En el Diente nos encontramos con otros amigos de Ismael que iban más tarde, un rato después del mediodía Héctor y Sofía se fueron, pero nos quedamos con el otro grupo y fuimos a rutas un poco más difíciles.
La verdad es que la pasé re-bien, los chicos fueron super buena onda y me tuvieron toda la paciencia para esperarme, explicarme, no ponerme nerviosa (ellos escalan todos los fines de semana) y prestarme el equipo necesario.
Nos quedamos hasta la tardecita que nos corrió la lluvia y tuvimos que guardar todo a los apurones, no se si el finde que viene pueda ir porque esta la fiesta de los dos años de Ciudad para todos y la de cumple de Rosario (la bióloga), pero voy a tratar de ir el siguiente, ya que para el 16 me invitaron a ir de campamento para escalar a un desierto que dicen que es muy lindo y quisiera ponerme las pilas para mejorar (mi brazo se porto joya, tenía un poco de miedo que me doliera y al escalar usé la muñequera, pero no hubo ningún problema).
Llegué muerta de cansancio, pero re-contenta, me di una ducha y cuando paró de llover fui al súper a comprar algo de comida, encontré un Cabernet Sauvignon de la finca Las Moras y me tenté. Los vinos mexicanos no son muy buenos, así que me di un gusto con sabor argentino.

Dos días fuera de la ciudad. Aire puro, verde, mar y buena onda.

Así fue que el jueves salí tempranito de casa (a las 5,30 de la mañana, tenía miedo de llegar tarde y que me dejen!!) al Seven Eleven donde me iba a encontrar con Rosario o Chayito la amiga de Gerardo que iba a trabajar a Colima.
Rosario es bióloga y ahora esta realizando una guía de murciélagos del Nevado de Colima (al lado del Volcán de Colima que esta en actividad, el Nevado es un volcán inactivo o apagado, el tercero más alto de México -4340 mts.), pero ahora tenía que ir a Colima por una consultoría a una empresa canadiense que esta construyendo un gasoducto desde el poblado de Manzanillo en la costa del Pacífico hasta Guadalajara, para lo cual tienen que atravesar un manglar (manglar es un ecosistema de esteros, mucha humedad con alta salinidad y una variedad de flora y fauna impresionante). El tema es que la ley protege el manglar (por su importancia en la preservación de muchas especies protegidas, por la acción de “freno” de los huracanes –el manglar calma los vientos y amaina las aguas, por lo que el huracán llega con mucha menos fuerza a la población más alejada de la costa-, por la cantidad enorme de dióxido de carbono que absorben en relación con su superficie y por su importancia económica – los sectores más pobres de los pueblos vecinos pescan en sus aguas), por lo que la empresa contrató a Rosario para que delimite el manglar y así poder planificar el gasoducto.
Chayio planificó salir el jueves temprano, trabajar toda la mañana y luego ir a la playa la tarde del jueves y el viernes, ya que le habían prestado una casa en Cuyutlan para quedarse con unas amigas que la iban a acompañar. Finalmente sólo fuimos Rosario, Martha (amiga de Chayio) y yo.
Como salimos tan temprano aún era de noche y no disfrutamos de los hermosos paisajes del camino, sino hasta una hora y media después de haber dejado Guadalajara. Durante todo el camino hay mucho verde y nos rodearon algunos cerros a lo lejos, pasamos al lado del Nevado de Colima (donde Chayio esta trabajando en su investigación y haciendo la guía de murciélagos) y por el Volcán de Colima (que es monitoreado permanentemente por ser un volcán en actividad), una laguna muy linda que la carretera dividió en dos (nota aparte, los peajes son carísimos!!!) y donde cada temporada invernal llegan aves migratorias del norte.
En estas regiones encontraron restos fósiles de mamuts (hay un esqueleto casi completo que a mi me impresionó en el Museo Regional de Guadalajara) y dientes de sable (dato para Tom, que ama los dientes de sable). Aquí se unen el clima templado del norte y el tropical de más al sur por lo que se encuentran especies de flora y fauna de ambos climas y forman un ecosistema único (los beneficios de viajar con una bióloga, dos de hecho, ya que Martha también es bióloga). Por ejemplo, en el Nevado, hay murciélagos que vienen desde tan al norte como Cánada o de climas mucho más cálidos como son en Costa Rica y Colombia.
Esa mañana en la ruta extrañe el mate. ¡Uno no puede andar por la ruta sin el acompañamiento de un amargo! En su reemplazo hubo buena compañía y cumbias colombianas y cubanas que animaban el aire cálido que entraba por las ventanillas.
Llegamos a Colima y fuimos a buscar a los topógrafos e ingenieros que nos iban a acompañar en el recorrido. Al principio todo el asunto estaba bastante serio y solemne, nos dieron cascos, lentes y chalecos de seguridad y nos llevaron al Estero Palo Verde (a una media hora de Colima, rumbo a la costa, muy cerquita de Cuyutlan, donde pasaríamos la noche), dentro del estero esta el manglar.
Comenzamos a caminar por el lugar tomando puntos con el GPS (Chayio, obvio, yo sólo sacaba fotos y disfrutaba del paisaje), el calor era terrible (mucho más calor que en Guadalajara), pero estábamos todos con ropa de manga larga y zapados bien cerrados por los mosquitos, víboras y vaya uno a saber que otra cosa pueda haber ahí (no quise preguntar mucho tampoco, preferí no saber, si me dijeron que había cocodrilos, pero ellos no me asustan, mi único problema son las víboras). De hecho los de la empresa no sólo tenía unos tremendos borregos y jeans, sino también unas polainas de cuero hasta la rodilla.
En el manglar vi unas mariposas bellísimas, amarillas, naranjas y negras, halcones (que nos revoloteaban con ganitas a pesar de ser carroñeros). La vegetación es muy tupida y bien cerrada, el topógrafo iba con dos ayudantes con machetes para abrir camino.
El trabajo se extendió mucho más de lo esperado así que como a las tres de la tarde fuimos a Cuyutlan (un pueblo de playa bien chiquito, que en temporada de verano se llena de gente, pero ahora estaba desierto) a comer algo antes de seguir trabajando (hagamos dijo el mosquito).
Paramos en “la tienda” de Camacho, un don muy amable que hizo de todo para que nos sintamos cómodas. Cuando le dijimos donde nos íbamos a quedar (habíamos pasado por la casa y como sus dueños no vienen desde hace 5 meses, en el frente teníamos una selva, pastos de un metro de alto y adentro estaba lleno de bicho muertos y vivos, moscas, mosquitos, cucarachas, largartijas, de todo!) arreglo para que nos fueran a fumigar y a cortar el pasto. Primero nos decía las ingenieras (la mayoría de los que vienen a trabajar en el gasoducto son ingenieros), después de varias correcciones nos empezó a decir las arquitectas, al ver que nuestras aclaraciones no eran escuchadas quedamos como “las arquitectas”. Fue muy gracioso cada vez que pasábamos por la tienda alguien nos saludaba al grito de “Adiós arquitectas” o “A sus órdenes arquitectas”.
Una vez que dimos por concluida la jornada laboral (todavía quedaba trabajo por hacer para el día siguiente), fuimos a darnos una ducha a la casa y descubrimos que no teníamos luz, al momento no era muy grave, pero implicaba que a la noche nos íbamos a morir de calor y nos iban a comer los mosquitos.
En lo que nos estábamos bañando vino un empleado de la empresa del gasoducto, mandado por Camacho, para que nos corte el pasto y nos invitó a cenar.
Caminamos cuatro cuadras al puesto de comida (los mejores burritos hasta ahora, ya me voy amigando con la comida mexicana), justo en frente de la Iglesia donde estaban dando misa con las puertas abiertas y alcanzábamos a escuchar el sermón (Plop!!). Después de la cena por fin fuimos a la playa, era de noche y mucho no se veía, pero el sonido de las olas golpeando la playa se oía fuerte y claro. Casi me largo a llorar, no me había dado cuenta de cuanto extrañaba el mar, se largo a llover, pero todavía era temprano, hacía calor y queríamos ir a buscar tortugas por la playa (acá hay tortugas enormes) así que volvimos a buscar unas linternas, en el camino lo vimos de nuevo a Camacho que al enterarse que no teníamos luz, nos mandó al mejor hotel de la ciudad a que habláramos con el gerente que es amigo suyo para que nos haga un descuento.
Al final así lo hicimos, y decidimos quedarnos en el hotel (la tarifa para la habitación triple era de $ 680, pero nos la cobró $ 500, que en pesos argentinos es más o menos de $180 a $ 135, que era lo que le daban a Chayio para gastos de hotel y ella se ofreció a pagarlo), con pileta e Internet inalámbrico, así que en lugar de ir en busca de tortugas, mudamos nuestras cosas al hotel y nos metimos a la pileta al lado del mar.
A la mañana siguiente Chayio se levantó temprano para ir a terminar la delimitación del manglar, mientras Martha y yo disfrutábamos de la pileta, la playa y limpiábamos un poco la casa que, aunque no nos habíamos quedado ahí, amablemente nos habían prestado.
Los locales decían que el mar estaba tranquilo, pero yo lo veía bastante picado, en general el mar de Cuyutlan esta muy movido y hay buenas olas para surfear, se hace muy profundo rápidamente y las olas tienen mucha fuerza, así que sólo me metí un poquito. Martha me explicaba que en general en todo el Pacífico el mar es mucho más profundo que el Atlántico a la misma distancia de la playa y que esto se debe a que las fallas de las placas tectónicas están muy cerca de la costa en el Pacífico, no lo había pensado pero tiene lógica.
Cuando vuelve Rosario de terminar de delimitar el manglar nos metemos un rato más a la pileta y antes de irnos almorzamos unos camarones en la playa (¡No se si pueda seguir soportando tanto sufrimiento!).
El viaje de vuelta se hizo ameno, nos reímos mucho y llegamos justo a tiempo para ir directo (con la bikini puesta y gusto a sal marina en la piel) a “Cine en el Parque”, la movida organizada por Ciudad para todos, donde vimos “Las trillizas de Belleville”, que me hizo acordar a Vane y Ana. Después de la peli nos fuimos con una banda de gente a la casa de Gerardo a tomar unas cervezas y bailar un rato.
Ahí fue donde lo conocí a Ismael o Maik, que me invitó a escalar el domingo, pero eso se los cuento después.

Notas:
- Hay muchisimisimo dengue por acá y los mosquitos (no sólo el del dengue) están a la orden del día.
- En Colima tienen lo que se llama “calles ecológicas”, en lugar de asfalto tienen como un empedrado que permite que crezca pasto y que el suelo absorba las abundantes precipitaciones en época de lluvia evitando que la ciudad se inunde.
- Café de olla, muy característico de México, es café de filtro con canela y otras especias, es riquísimo, pero hace mucho calor para tomarlo!!La planta de agave, que es con la que se hace el tequila, también se puede comer asada y dicen que es muy rica. Cuando da flor la planta se muere y ese es el momento de cortarla y asarla.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Todo lo contrario a un día de miércoles

El martes después del Museo almorcé en casa y me fui un rato a la biblioteca, mandé algunos mails a gente de couchsurfing para conocer un poco más de “locales” y a la noche me fui a ver Todas las mañanas del mundo, a la sede de la Alianza Francesa (que tiene un cine-teatro hermoso!!!). La peli me pareció demasiado lenta, pero tengo que reconocer que yo estaba cansada, la música me gustó mucho.
El miércoles me pasé el día leyendo sobre el EZLN (hay muchísimo material en la biblio) hasta que se hizo la hora de encontrarme con Gerardo (de couchsurfing).
Aprendí la importancia que tuvo la Diócesis de San Cristóbal de las Casas en la formación de diáconos y catequistas que luego se fueron los líderes comunitarios que contribuyeron a la autoorganización de los indígenas/campesinos/obreros de Chiapas, favoreciendo la experiencia de democracia asamblearia aún antes del surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (dato para el Holandes) y que actualmente siguen trabajando junto al EZLN, y de la actual organización para la administración general, de justicia, educación y salud en los Municipios Autonómos Rebeldes Zapatistas (MAREZ). Aprendí como se organizan las Juntas del Buen Gobierno (por oposición al mal gobierno del Estado burgués), la imposibilidad de pagar a quien realiza un servicio público (en la Junta de Buen Gobierno, como promotor de salud o de educación) debido a la falta de recursos económicos y financieros, pero si se garantiza el alimento y cuidado a las familias para que todos puedan contribuir al proceso revolucionario. También aprendí sobre las dificultades de la lucha que llevan las mujeres por la igualdad de género, tras cientos de años de machismo.
Cuando vuelvo a casa lo encuentro a Benjamín, y sin quererlo terminamos hablando de política municipal. El trabaja en el ayuntamiento y es del PRI (Partido Revolucionario Institucional). Resulta que el PRI ganó las últimas elecciones municipales después de 14 años de gobierno del PAN (Partido de Acción Nacional, más conservador que el PRI) y asumen el 1 de enero. Benjamín está muy entusiasmado con la posibilidad de cambio que se abre con la nueva gestión municipal a pesar que el Estado de Jalisco es sumamente conservador y el Gobierno Estatal sigue siendo del PAN. Me llamó mucho la atención que no conocía Las venas abiertas de América Latina hasta que Chavez lo puso en la agenda pública internacional, pero luego de leerlo le gusto mucho.
Benjamín es abogado (como Gonzalo y Luis, vivo con puros abogados!!) y su orgullo es haber entrevistado a Evo Morales cuando estuvo en Guadalajara como líder sindical, dos años antes de postularse para la presidencia de Bolivia, ve con simpatía y buenos ojos los cambios políticos en América Latina de los últimos años, lo que choca (a mi entender) con su compromiso con el PRI. Lamentablemente tuve que interrumpir la charla o llegaría tarde al encuentro con Gerardo.
Me encontré con Gerardo en el “camellón”o boulevard de la Av. Chapultepec (que es super top!!), el llegó en su bici y fuimos a un cafesito por ahí no más. En seguida encontramos puntos de interés en común (es psicólogo y quiere estudiar antropología, además le encanta la fotografía), y si bien esta en Guadalajara por una o dos semanas más antes de irse de viaje, me habló mucho de la ciudad y sus alrededores, y del activismo de Ciudad para todos, un grupo de gente que se moviliza para que el automóvil particular no sea el privilegiado a la hora de planificar el tránsito y la distribución del espacio público. Protestan interviniendo creativamente en el espacio urbano con distintas modalidades. Una de las intervenciones que tiene su marca registrada es el Parque Nómade y consiste en cortar un carril en alguna avenida, colocando masetones con árboles y plantas, césped sintético, bancos y juegos para niños de manera tal de hacer visible lo que se pierde dando prioridad a la circulación de autos particulares.
El énfasis esta puesto en el uso de la bicicleta como medio de transporte (trabajan mucho con en coordinación con Guadalajara en bici), pero en general la presión hacia el ayuntamiento tiene que ver con dejar de privilegiar el auto particular y que en lo que respecta a la planificación urbana la prioridad sea la protección del más vulnerable y menos contaminante, es decir privilegiar al peatón (incluyendo por supuesto, personas con movilidad reducida), ciclistas, transporte público, y en último lugar el automóvil particular (en la ciudad de Guadalajara hay un automóvil cada 2,2 personas).
Otra de las intervenciones que tienen que ver con la recuperación del espacio público es Cine en el Parque, una vez por mes, después de la masa crítica (un paseo en bici de dos horas que se hace en muchas ciudades del mundo el último viernes de cada mes, para visibilizar a los ciclistas como parte del tráfico de la ciudad y por lo tanto dignos destinatarios de políticas y espacio público -bici sendas o ciclovías-) se monta una lona al aire libre que sirve de pantalla donde se proyecta una película votada durante la semana anterior por Internet.
En el medio de tanta charla se acordó que una amiga suya bióloga viajaba al día siguiente a una playa a 3 horas de Guadalajara por trabajo y lo había invitado, el no puede ir pero amablemente me pasó la invitación a mi.
Como la gente de Ciudad para todos se junta todos los miércoles a las 20 y ya era la hora me invitó a participar de la reunión. En la reunión hubo torta y festejo por los dos años del grupo, y finalmente llegué a casa después de las doce para preparar mi mochila y salir a las 6 de la mañana con Rosario (la amiga de Gerardo) rumbo a Colima y Coyutlan. Sin darse mucha cuenta Gerardo me organizó los próximos días.

Reflexiones y citas

Por la calle uno puede encontrar fácilmente indígenas de diferentes etnias mendigando, especialmente viejos, muy arrugados, caminando con dificultad o andando en silla de ruedas. No me atrevo a fotografiarlos, creo que por respeto, seguramente no se negarían a ser fotografiados por unas monedas arrojadas en sus manos curtidas por los años, el sol y el trabajo en la tierra que nunca les perteneció, pero me resulta muy violento ponerle precio a su dignidad y finalmente nunca se que hacer.
Todos tenemos derecho a un plato de comida, a una alimentación digna a lo largo de toda nuestra vida, y los derechos no se materializan a cambio de fotos, eso es limosna y no hay ética ni dignidad en la limosna.

Pareciera ser que los empleos a los que puede aspirar una persona con estudios secundarios en Guadalajara son: guardias de seguridad, empleados de grandes cadenas (como Burguer King, McDonald, Seven Eleven, Oxxo, etc.) o venta ambulante (que por supuesto no es empleo). Hay una dificultad muy grande para la mayoría de la población para garantizarse los ingresos mínimos necesarios para vivir dignamente (incluso más que en Argentina).
Por ejemplo en la Comisión Federal de Energía, que es la empresa del Estado Federal que provee la energía eléctrica en todo el país, sólo ingresan a trabajar quienes son parientes directos de los empleados, no importa la educación, ni la capacidad o motivación para el trabajo, ese es el único requisito; y aún así no es tan sencillo, uno debe permanecer en lista de espera durante años esperando que se produzca una vacante.

Se están produciendo en distintos lugares del país, pero especialmente en Ciudad de México ataques a empresas multinacionales, cajeros y concesionarias de autos, los medios reflejan un clima social “enrarecido”, de mucha disconformidad y alta conflictividad social (más del 50 % de la población es pobre por ingresos, es decir que no gana para cubrir las necesidades mínimas de alimentación, vivienda, vestido, educación, etc.).

Del libro Zapatistas un nuevo mundo en construcción de Guillermo Almeyra y Emiliano Thibaut
“Se levantaron en armas porque, como declararon, preferían morir de un balazo que lentamente de diarrea o de las otras enfermedades de la desnutrición y la miseria…
La acción de un puñado de indígenas en la Selva en el extremo sur desconocido de un país poco conocido tuvo pues una repercusión mundial, porque incluso un dedo, si golpea la piel tensa de un gran tambor, puede provocar un eco ensordecedor. El EZLN no tensó por sí solo el tambor de nuestra vida cotidiana. Esa tarea la esta haciendo el puñado de especuladores que la prensa llama ‘mercado’ y la están haciendo sus organismos internacionales, promotores de la usura, la explotación y el despojo, y los gobiernos al servicio de todos ellos. Pero el impacto en el tambor multiplica su resonancia porque ahora es posible saber que hacen esos indígenas, que modernidad construyen, que ética defienden, y porque su ejemplo estimula, no a imitarlos o reproducir su ejemplo, cosa que es imposible porque depende de las condiciones locales irrepetibles, sino a buscar nuevas vías, como ellos, creativamente, osando.” (Pág. 26)

“Era una foto perfecta. Salí del agua y le pregunté a uno de ellos si podía tomarla. Me respondió suavemente y con una sonrisa que no. Se me erizó la piel por la respuesta y le respondí sonriendo que por qué no, y el muchacho de unos catorce años me dijo con voz fuerte y clara sin perder la suavidad “porque no y ni modo”. Fue tan amable y contundente que desistí de inmediato. No era muy difícil de entender lo que pasaba, pero ciertamente era impresionante: este muchacho se crió en el proceso revolucionario zapatista. Para la irrupción rebelde en 1994 él tendría unos dos años. Él aprendió a pensar y a leer en rebeldía y he ahí los resultados: un muchacho alegre, orgulloso, que se desempeña en su tierra sin miedo ni sumisión ante los visitantes de la ciudad, y que seguramente no tiene en su vocabulario la palabra patrón.” (Pag. 51-53)

Museo de las Artes

En otro edificio que fue sede del Rectorado de la Universidad de Guadalajara, actualmente esta el Museo de las Artes (la entrada cuesta $ 45, pero los martes es gratis!!), hacia allí fui el martes a la mañana y me encontré con una muestra de David LaChapelle el fotógrafo norteamericano con el que las estrellas de Hollywood se fotografían gratis, sólo para decir que trabajaron con el (jaja!!).
David LaChapelle es super crítico de la sociedad de consumo norteamericana, especialmente el microclima californiano (super consumista, superficial e irreal). La muestra se llama “Heaven to hell” o “Del cielo al infierno” y consta de varios grupos de fotografías con distintos hilos conductores.
Al grupo Delirios de la razón lo integran miradas modernas sobre obras como “La Piedad”, “La última cena” y “El diluvio”; la última fue la que más me gustó, hay que destacar el uso de iconos de la sociedad de consumo, marcas y artículos de super lujo en contraste con necesidades básicas con las que no tienen ninguna relación. Otro grupo eran fotografías de autos chocados impresas sobre cartón corrugado que formaban esculturas.
Renovación y Decadencia hacen referencia a la irrealidad del mundo en el que vivimos en el sentido del constante juego de simulación en el que nos vemos envueltos (mucho más en ciudades como Los Angeles en EEUU donde centra su trabajo David LaChapelle).
HolyWar es un juego de superposición de imágenes fotograficas de dos metros de alto por ocho (aproximadamente, quizás más) de largo, donde se representa el bombardeo a Sarajevo, el discurso religioso y su manipulación mediática. Es una imagen compleja, con muchos elementos y colores, pero de fácil lectura (aunque no sea de las que más me gustó).También en el Museo, en una sala de proyecciones, se expusieron dos cortos documentales, dirigidos por Frank Benvenuto sobre la realización de la producción fotográfica de “Diluvio” y “La Piedad” que forman parte de la muestra general.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Empieza la semana

A la mañana fui al correo a mandar unas postales a Ushuaia, tanta tecnología y no tengo la dirección postal de casi nadie!! Para no retrasar el envío las mandé a la casa de mis viejos y de ahí irán repartiéndose. Me dijeron que la correspondencia demora tres semanas en llegar, ojala que no más que eso!!
Después de hacer algunas compras en el mercado, lavar ropa y terminar con las tareas de “ama de casa” salí para la biblioteca por un camino distinto para pasar por unas plazas que no conocía.
En el camino encuentro la Escuela de Medicina, cruzó un barrio residencial de clase media y casas bajas; lamento no haber salido con la cámara hay muchas comercios que en apariencia son casas, ponen la mercadería o los productos que venden en una ventana o simplemente en el piso cerca de la puerta (mucha ropa, zapatos o lámparas y otros artículos de decoración) con carteles bien graciosos.
Cerca de la Calzada Independencia hay una plaza donde hay travestis, siguiendo por la avenida están los locales de tatuajes más under (y probablemente menos higiénicos y seguros) y venta de pornografía.
Ya por la peatonal yendo de la escultura de la Imnmolación de Quetzatcoatl hacia el centro encuentro algunos hombres con su escritorio y máquina de escribir en el medio de la vereda, resulta que el Juzgado esta cerca y en plena era digital las personas de menos recursos tienen que pagar para que otros apenas un poquito mejor tipeen en máquinas de escribir de hace 20 años sus documentos y notas (en el correo también tenían máquinas de escribir en lugar de computadores y eso contrasta con todos los Domino´s, Seven Eleven, Sears y cuanta franquicia haya, vuelvo a lamentar haber dejado la cámara de fotos en casa!).
Llego a la Biblioteca, que fue e primer edificio que tuvo la Universidad de Guadalajara en el siglo XVIII y se inauguró como biblioteca el 19 de Julio de 1991. A su inauguración asistieron varios presidentes latinoamericanos entre ellos Carlos Saúl Menem. ¿Qué tal? ¡El tipo inauguraba bibliotecas mientras presentaba el 1 a 1!
En la biblio me paso la tarde leyendo y cuando salgo alrededor de las 8 me agarra la lluvia a mitad de camino. Obvio!! Es Ley de Murphy, si dejé la ropa tendida y salí sin la campera para lluvia…tenía que llover!!!
Llego empapadísima (no hay escapatoria de las lluvias tropicales, no existe el “me mojé un poquito!”)

Impresiones:
- La policía anda por las calles con armas largas…se respira cierta calma forzada…no me da miedo, pero si la sensación de que en cualquier momento puede ocurrir una tragedia.
Si hoy sucediera aquí algo como lo que pasó en DF hace unos días (un hombre que escribía una pared fue alertado por la policía y comenzó a disparar en una estación del metro diciendo que su acción era contra el gobierno, no contra el pueblo) creo que la policía respondería con fuego sin miramientos. Desconozco el nivel de formación de la policía mexicana pero de cualquier manera creo que no se justifica la presencia de tantas armas en la calle, uno las ve todo el tiempo, en cada esquina, a la salida del banco, en las plazas; dicen que hay una guerra desatada contra los carteles de la mafia mexicana que opera aquí y en estados unidos y que tienen asiento en Guadalajara. Camino por las calles sintiéndome bastante segura, sino fuera por la imagen de la policía y la milicia con sus armas largas listos para disparar a quien estornude demasiado fuerte.
- En la entrada a la Biblioteca hay que registrarse y dejar anotado nombre, apellido, ocupación e institución a la que pertenece. Siempre chusmeo las ocupaciones y me agrada encontrar no sólo estudiantes y profesores, sino obreros, jubilados y vaya a saber que más (alguien en ocupación puso lector, me gustaría revisar el registro completo a ver que más encuentro).
No muy lejos mío, en otra mesa, un hombre grande, canoso y arrugado toma notas aplicadamente con pulso tembloroso.
Si me sorprende que la mayoría de los que asisten sean hombres. ¿Dónde están las mujeres?

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Domingueando

El domingo cumplí una semana en Guadalajara, había quedado en chatear con mis hermanas, mi mamá y mi sobrino al mediodía y después pensaba ir a Tonala, un pueblo cercano que me recomendaron visitar por su historia (allí se realizó la primera fundación de Guadalajara) y por la feria de productos artesanales de los domingos.
Salí temprano de casa a una confitería con Internet inalámbrica, así almorzaba mientras respondía unos mails y esperaba que la familia se conecte.
En el camino encontré una feria de lo más tentadora, productos orgánicos, todo caserito y casi todo vegetariano y delicioso!!! Unos panes saborizados para morirse, ahí quedó el proyecto de almorzar en la confitería!
Me morí de risa jugando con Tom a través de una camarita y miles de kilómetros que nos separan, como tuvimos algunos problemas técnicos y horarios (no es fácil coordinar la comunicación argentina-francia-méxico, jajaja!!!) se me hizo tarde para ir a Tonala (pero aún es temprano para ir a casa a no hacer nada) así fue que salí a conocer nuevos lugares de la ciudad.
Paso por una especie de zona “alternativa cheta” donde están los tatoo shops, skaters, etc.
En un barrio residencial de clase media baja y baja encuentro una especie de comparsa que en una plaza ensaya las danzas con las que homenajeará, junto a muchos otros, a la Virgen de Zapopan (un pueblo vecino) el 12 de Octubre que es su día (los grupos se juntan a la medianoche del día anterior en frente de la Catedral, bailan toda la noche y alrededor de las 6 de la mañana salen en procesión a Zapopan), me detengo un rato a disfrutar del espectáculo público y después sigo camino.
Vuelvo al centro y en una fuente hay un nene de 4 o 5 años pasándola de maravillas en el agua, me cuelgo sacándole fotos y disfrutando casi tanto como él. Otros chicos se suman pero ninguno con su misma euforia.

martes, 22 de septiembre de 2009

Algunas fotos de mi home sweet home...

Desde la cocina se ve a la izquierda de la pantalla la puerta de entrada de la casa y a la derecha la puerta de mi habitación.
Este es Karma en haciendo fiaca en mi pieza y más abajo la ventana que da a la calle.




Primer día en CODENI

El sábado al mediodía empecé con el taller en CODENI. Por miedo a llegar tarde, llegue tan temprano que todavía estaba cerrado (los sábados sólo abre para el taller), la primera en llegar fue Ivete (es psicologa y trabaja en CODENI asistiendo a los distintos talleres) detrás de ella empiezan a llegar algunos chicos y más tarde Pepe y Carla (Pepe es fotográfo y editor fotográfico de un diario local y Carla es aficionada a la fotografía y colabora con el taller, ellos comenzaron con el taller hace casi un mes).
Los chicos llegan desordenadamente y algunos muestran sus fotos con entusiasmo, otros con cierto desinterés por el taller se van a jugar a la pelota (cada uno de los chicos tiene una cámara con memoria y baterías de Listen to my pictures una organización que las cedió en préstamo para el proyecto). Mientras Pepe baja las fotos de la tarea que tenían que hacer durante la semana los chicos se dispersan y es difícil para Carla hacer que le presten atención para anunciar que vamos a ir al Expiatorio (en realidad a la plaza en frente del Expiatorio –al fin y al cabo una Iglesia-) y tenemos que buscar fotografiar contrastes, que pueden ser de color, de textura o de lo que se nos ocurra. Con la consigna más o menos escuchada salimos hacia Expiatorio (a 4 o 5 cuadras de la sede de CODENI).
La actividad con los chicos me agradó y me divertí mucho, los chicos tienen entre 8 y 12 años. Hay tres muy cancheritos (también son los más grandes) que no dan mucha bola y se cuelgan pendientes de las chicas, pero uno en particular tiene buen ojo y cuando ve algo que quiere fotografiar no dispara en seguida, sino que le da vueltas buscando el ángulo.
Las nenas son un sol, una en particular debe tener un problema de desnutrición grave porque tiene 8 años pero parece de 6, tiene aspecto de cansada, no se ríe ni habla mucho.
Otro de los chicos, de 11 años, ayuda a su papá en su calandria (coches tirados por caballos que pasean a los turistas por la ciudad) y me dio un listado detallado de los lugares que tenía que visitar con datos históricos y todo, me preguntó un montón de cosas de argentina y dijo que le iba a pedir permiso al papá para llevarme a pasear.
En total son 12 chicos, creo que hay que reforzar lo grupal y no perder de vista que son chicos al momento de pensar los ejercicios y dar las consignas. El jueves me reúno con Pepe y Carla para planificar un poco y organizar el trabajo (se supone que a fines de noviembre el taller cierra con una muestra del trabajo de los chicos).
A la tarde iba a ir a la inauguración de una muestra de la amiga de un chico que trabaja en el hostel que estuve los primero días, pero al final nos desencontramos (las delicias de no tener celular) y me fui a ver “El diario de un loco” de Nicolai Gogol, una obra de teatro con una actuación para resaltar.

Para no ser menos que los mexicanos!!

Día en la Biblioteca

El viernes me levanté y después de bañarme y desayunar me fui a la biblioteca, estuve leyendo hasta pasado el mediodía que la biblioteca cierra una hora para desinfectar todo (cuando entras te echan alcohol en gel en las manos) y reabre a las 16 hs. En ese rato que tenía me fui a comer a una plaza una ensalada que me había llevado y después visité nuevamente el Museo Regional de Guadalajara cuyo recorrido no había concluido.
En el primer piso del Museo encontré una muestra de pinturas de la colonia, todas ellas de gran tamaño (3 x 2 metros la más chica) y con imágenes de santos y santas (no me interesan particularmente las imágenes religiosas y me pareció bastante aburrido, disculpen mi ignorancia!).
En otra sala había una muestra de imágenes de la vida de San Francisco de Asís, cuyo valor artístico tampoco pude apreciar, salvo que me causó mucha gracia una mesa, regalo para algún obispo entongado con la corona española, con sus patas talladas con rostros diabólicos. Me pregunto si es una burla hacia el clero y la Iglesia en general o los rostros diabólicos son sólo una impresión mía y forman parte de la estética de la época.
Recorro más salas con pinturas de obispos, curas y frailes con cara de ambiciosos, sádicos, pedófilos y torturadores. Finalmente encuentro una sala que relata el proceso de colonización del occidente de México, que aparentemente fue muy distinto del de oriente, pero ya es la hora en que abre la biblioteca y tengo más ganas de volver a los “Cuentos de la Revolución Mexicana”, otro día será.
El libro que estaba leyendo es una compilación de diversos autores que hay escrito cuentos con la Revolución Mexicana como tema central, pero desde puntos de vista muy variados y con distintas propuestas estéticas. Cada uno de los relatos es acompañado por una breve reseña de la vida del autor y aprovecho esta información para guiar mi búsqueda de futuras lecturas.
Hay relatos violentos, sanguinarios, heroicos y egoístas.
Trascribo un fragmento de el cuento “Mejor que perros”, escrito por José Mancisidor.
“ - ¿Por qué peleas tu?
- No te lo podría explicar…pero es algo que sube a mi corazón y me ahoga a toda hora. Un intenso deseo de vivir entre hombres cuya vida no sea peor que la vida de los perros.”
Alrededor de las ocho salgo de la biblio rumbo al super. Ir al supermercado es una tortura, me descubro bastante quisquillosa con la comida (antes no era así) y paso media hora descifrando lo que tiene cada paquete para finalmente no comprar más que yogurt y frutas.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Vida urbana. Biblioteca, Museo Regional y plazas.

Al día siguiente de la parranda, a las 10 de la mañana empezaba el desfile, y aunque suponía que no sería muy distinto a los desfiles de los 12 de Octubre en Ushuaia tenía la esperanza de encontrar algunos mariachis para hacer fotos y divertirme (los mariachis tienen la mejor onda y son muy divertidos!!).
Lamentablemente mis sospechas eran ciertas, desfilaron las fuerzas armadas, la policía, los bomberos, la cruz roja y nada de Mariachis.
Después de dar una vuelta por la plaza una vez que termino el desfile me fui a buscar mis cosas al hostel y a instalarme en mi nueva casita.
A todo esto, entre la trasnochada y el desfile bajo el sol estaba muerta. Limpié la habitación, ordene mis cosas y me dormí la primera siesta mexicana.
Cuando me desperté habían pasado tres horas y estaba abombadísima, así que me fui a caminar y tomar un poco de aire fresco, pasé a comprar algo para comer (no tenía nada!!) y después de nuevo a dormir (tenía muuuuuuchooooo sueño y el calor no ayuda!!).
Al día siguiente (jueves) me levanté para ir a la Biblioteca de Iberoamericana a averiguar que necesitaba para hacerme socia y sacar algunos libros. Resulta que no realizan préstamos externos, sólo consultas en el salón de lectura de la biblioteca. Por suerte el salón es muy agradable y cómodo, tiene unos sillones que, si bien no se comparan con los puff del sucucho literario, son buenísimos para tirarse a leer, techo alto y murales preciosos encima de los estantes de libros. Además la biblioteca tiene Internet inalámbrica y rápidamente se convirtió en mi lugar preferido.
Busque algo de literatura mexicana y me quedé leyendo unos cuentos de la Revolución Méxicana. No había terminado el segundo cuento cuando mi lectura es interrumpida por un chico que conocí en el hostel. Charlamos brevemente y después de ver lo que estaba leyendo me contó algunas historias de la tradición oral (sobre todo de las “adelitas”, mujeres campesinas de la zona de Puebla y Morelos que ayudaban a los revolucionarios dándoles techo, comida e información sobre el enemigo, muchas veces también peleaban a su lado). Al rato fuimos al Museo Regional de Guadalajara, donde hay por lo menos 5 o 6 muestras diferentes. Una en la que se expone el acervo paleontológico de la región y hay, entre otras cosas los restos óseos de un mamut completo. También hay una colección bastante importante de arte y artículos de uso cotidiano de las culturas precolombinas y la última que recorrimos (ya teníamos hambre y de todas formas la entrada es gratuita así que volveré otro día) era una revisión del archivo fotográfico de Jesús Hermenegildo Abitia Garcés músico, fotógrafo y realizador cinematográfico de la Revolución Mexicana. Esta última contiene más de 250 imágenes de la Revolución, me impacto mucho ver a Pancho Villa, Emiliano Zapata, Obregón, Madero, Huerta, Carranza, en los grandes momentos de la historia de Mexico y a tantos anónimos campesinos revolucionarios que pusieron su esfuerzo, esperanza, trabajo y hasta su sangre en la lucha por un México donde todos los hombres puedan vivir una vida digna.
Del Museo nos fuimos a comer al Mercado Corona (un mercado muy típico de la ciudad), probé unos tacos de pollo pero la comida mexicana no es lo mío y todas las preparaciones llevan carne, así que terminé comiendo una jericaya (postre que se hace con leche, huevos y azúcar y se cocina en el horno).
Después de comer pasé a buscar la compu por casa y volví a la biblioteca a responder unos mails y leer un rato más.
Al salir de la biblio me fui a dar una vuelta antes de volver a casa y en una de las plazas había un grupo de percusión y danza que estaban haciendo lo que a mis ojos parecía una danza ritual como de purificación o algo así, había incienso y bailaban en círculo (al que no se podía entrar sin haber pasado por el incienso), me colgué un rato mirando, la música hipnotizaba y los movimientos de la danza se veían agotadores (saltos y vueltas sin descanso, y no se olviden del calor!!!). Algunos de los que estaban en el círculo tenían muñequeras o tobilleras hechas con caracoles que sonaban al bailar. En un momento cambio la formación, se desarmó el círculo y se hizo un saludo al sur y al norte con dos caracoles enormes utilizados como instrumentos de viento, después se armó el círculo nuevamente y siguieron bailando. No quise interrumpir con preguntas tontas, pero alcancé a escuchar que se juntan los martes y jueves a las 20, con ese dato me fui caminando a casa pensando en volver el martes siguiente.
En el camino de vuelta, atravesando otra plaza, me llamo la atención ver que la mayoría de los que estaban sentados allí eran hombres, observe un poco más y por la ropa, peinados y formas supongo que debe ser un punto de encuentro para hombres homosexuales (la homosexualidad femenina tiene otros códigos), no se si se trata de un lugar “de levante” o de trabajo para taxi boys, ya que a la vuelta también vi prostitutas, todo cuidadosamente custodiado por los “biciclos” (la poli en bicicleta).
Sigo caminando y en la galería de la Secretaría de Turismo (en la margen de otra Plaza, todavía no las ubico a todas por los nombres) también encuentro hombres sentados en parejas, esta vez jugando al ajedrez, pero sólo hombres, ni una mujer. Tendría que haber preguntado si me dejaban jugar para ver que pasaba, pero estaba cansada y son un desastre en el ajedrez.

Notas:
- Veo mucho trabajo infantil, venta ambulante en la que los niños asisten a los adultos, en el super hay chicos que embolsan las compras (muy pocos, la mayoría son adultos, pero hay) y emprendimientos familiares en los que los chicos cumplen una función durante algunas horas al día.
- Aún teniendo legislación vigente que prohíbe el encierro de menores de edad hay cantidad de institutos de menores superpoblados en todo el país donde los chicos están privados de la libertad, no es consuelo, pero aunque todavía quede mucho por hacer en Tierra del Fuego la situación no parece tan grave comparada con lo que sucede en otros lugares.
- Cuando pregunto por lo que sucede en Chiapas con el Subcomandante Marcos en general la respuesta es media tibia y la sensación que transmite es que en realidad ya no sucede nada. Me sorprendió mucho encontrar esa misma sensación en personas de Ciudad de Mexico y Guadalajara e incluso de distinto nivel económico y cultural. Hay mucho descontento con el gobierno, pero se manifiesta como una aletargada resignación. Maldita sociedad de consumo! Los adultos dicen que el inconformismo es propio de los jóvenes o de los románticos, los jóvenes sólo lo manifiestan en sus patrones de consumo y a los “románticos” los meten presos.
En Agosto estuvo Manu Chao acá en Guadalajara (me lo perdí por tan poquito!!), dio un concierto en el que manifestó su apoyo a la lucha revolucionaria en Chiapas (como siempre) y a los docentes que estaban en conflicto en el mismo estado. Tuvo que suspender el siguiente concierto porque si se presentaba lo iban a arrestar por sus dichos.
Para el resto de México, o por lo menos lo que he visto del DF y Guadalajara, todo lo que sucede en Chiapas es lejano, como ajeno.
- Los chicanos son los mexicanos que tienen hijos nacidos en Estados Unidos (yo creí que así le decían a todos los mexicanos que estaban viviendo en EEUU). Los pochos son los hijos estadounidenses de padre o madre mexicano. Entre ellos y los “mexicanos” (padres e hijos nacidos en México) hay muchísima discriminación tanto en México como en EEUU, especialmente en California donde la comunidad de inmigrantes mexicanos es enorme y esta sumamente fragmentada.
- Mezcal es como un aguardiente, mucho más fuerte que el tequila (no lo probé).

Sandra: la semana que viene se hace el Congreso Nacional de Mediación aquí en Guadalajara y habrá talleres abiertos sobre mediación comunitaria, familiar y algunos otros. Probablemente vaya al de mediación y menores en conflicto con la ley a enterarme un poco más como se trabaja.

Diego: A principios de octubre se hace un Encuentro de Ciclismo Urbano. ¿Que tal? Si te querés venir no te preocupes por el alojamiento, tengo un colchón para prestarte.

Resumen de lo festejos

Al día siguiente de la parranda, a las 10 de la mañana empezaba el desfile, y aunque suponía que no sería muy distinto a los desfiles de los 12 de Octubre en Ushuaia tenía la esperanza de encontrar algunos mariachis para hacer fotos y divertirme (los mariachis tienen la mejor onda y son muy divertidos!!).
Lamentablemente mis sospechas eran ciertas, desfilaron las fuerzas armadas, la policía, los bomberos, la cruz roja y nada de Mariachis.
Les mando un videito casero, especialmente para Tomi, Nico y mis primitos para que no se aburran con tanto relato, con fotos de los preparativos, la noche del grito y el desfile del 16. El audio lo grabe con el mp3 de unos mariachis que estaban tocando en la vereda cerca del hostel la tarde antes del grito así que es de muy mala calidad, pero vale para muestra. (todo gracias a Nacho que me enseño a usar el Movie Maker. Nacho: Gracias totales!!!).

viernes, 18 de septiembre de 2009

Viva Mexico cabrones!!

Salgo del Hospicio y camino por una plaza y otra hasta la Plaza donde la Ciudad se prepara a dar el grito de la Independencia esa misma noche.
El olor a cebolla recién picada, carne asada, chorizo, fruta fresca y alcohol acompañan el sonido de los parantes de los gacebos golpeándose unos con otros o las lonas resistiendo el sol, tensadas entre los árboles y los faroles.
Todo en el ambiente anticipa el festejo nocturno, por lo que decido ir al hostel a ducharme y descansar un rato antes de volver a la Plaza.
En el hostel también hay algo en el aire, después de bañarme comparto unas cervezas con Talía y su mamá con quienes desde la noche anterior también comparto el cuarto (son de un pueblo cerca de Teotihuacan y están en Guadalajara por tres días). Cerca de las 20,30 hs. me dan ganas de ir a ver como esta todo en la Plaza, Talía me acompaña (estamos a sólo tres cuadras y unos cuantos puestos de control donde nos revisan las carteras) y resulta ser una excelente guía gastronómica entre tantos puestos de comida que ofrecen pozole rojo y blanco, tacos, tortas ahogadas (bien típico de Guadalajara), buñuelos (que no son los que comemos en argentina, sino más parecidos a los panqueques, pero mucho más gruesos y crocantes), picote, pay de queso (tarta de ricota, pie en inglés es tarta y se pronuncia pay), jericalla (un postre parecido al flan si se quiere) y otras tantas otras cosas.
La gente va y viene, no hay lugar libre entre los puestos, todo es bullicio y fiesta. El grito va a ser a las 11 hs., así que después de un rato volvemos a buscar a la mamá de Talia, sólo que ya había salido y en cambio nos quedamos con Jesús y Miguel (dos chicos que trabajan en el hostel) que a cambio de nuestra ayuda para hacer un cartel no invitan a probar distintos tipos de tequila. Un rato y un par de tequilas más tarde volvemos a la plaza, llegamos tarde para el grito (no alcanzamos a pasar los controles a tiempo y lo escuchamos a dos cuadras) pero justo a tiempo para los fuegos artificiales, la música y el baile.

Datos sobre el tequila:
- Es originario de un pueblo llamado Tequila que queda a una hora de Guadalajara.
- La planta con la que se hace el tequila se llama agave y cultiva de 6 a 10 años antes de ser cosechada para hacer un litro de tequila.
- Actualmente el tequila tiene entre 36 y 40% de alcohol, antes se hacía con el 60 o 70% de alcohol y durante la revolución era la única anestesia con la que se contaba.
- El buen tequila esta hecho 100% de agave (es común que se lo mezcle con caña o ron lo que abarata costos y calidad).

Visita al Hospicio Cabañas.

Llegué a la casa de Benjamín y me sorprendí gratamente, la verdad esperaba un sucucho de mala muerte, no se porque, supongo que quería bajar mis expectativas para aguantarme la que viniera. Por el contrario, la casa no es muy grande, pero es cómoda, tengo una habitación bastante grande y luminosa, las ventanas dan al frente (todavía no me acostumbro mucho a los ruidos de la calle) y la puerta a un patio interno con muchas plantas, luego del cual esta la cocina comedor y sigue el baño y dos habitaciones más (de Benjamín y Andrés), la escalera que sube a la terraza y a la habitación del piso de arriba (la de Gonzalo, hermano de Benjamín) esta al final.
Al llegar me recibió “Karma”, el labrador color chocolate de Benjamín, que es un santo, es muy obediente, compañero y por supuesto, como todos los labrador siempre, siempre, siempre quiere jugar. Karma fue otra grata sorpresa del destino, ya que cuando iba hacía la casa pensé que no había visto mucha gente paseando perros y que sería lindo que hubiera uno en la casa, no se, me agarro extrañitis de Inti y Antón.
Benjamín también me cayo muy bien, es muy tranquilo, siempre sonriente y agradable, me explico la dinámica de la casa (básicamente no hay nadie en todo el día porque los chicos trabajan) y acordamos algunas normas de convivencia (cada uno limpia una vez por semana, esas cosas). Me fui muy contenta con la tranquilidad de haber visto la casa y de haber conocido a Benjamín, estoy segura que nos vamos a llevar bien. Es raro, pero esto me tenía un poco ansiosa, nunca conviví con nadie que no fuera mi familia, y ustedes saben como es eso uno puede enojarse y gritar todo lo que quiera pero al final igual es la familia, además ya hace un tiempo que vivo sola y también tengo mis mañas.
Me fui caminando sin saber muy bien con que rumbo y llegué a lo que me dijeron era un Centro Cultural, pero una vez dentro me enteré que era el Hospicio Cabañas (Rodrigo y Evelyn me hablaron de él en el DF y de los murales que allí pintó Orozco).
El Hospicio Cabañas fue fundado por un buen cura venido de España (por supuesto) llamado Cabañas y allí se daba hospedaje y comida a quien estuviera solo en el mundo y no tuviera donde caerse muerto, también se enseñaban oficios (panadería, herrería, carpintería, costura, etc.), actualmente el edificio (enorme, de una manzana completa sino más, con patios internos, altas puertas de madera tallada y galerias) es galería de arte, escuela de música y sala de proyección de cine independiente. Pero lo que atrae a los visitantes (los que vienen con intensión de llegar acá y no los que como yo, llegan de casualidad) son los impresionantes murales de Orozco en lo que era el templo dentro del Hospicio, ya despojado de su altar y cualquier otro símbolo religioso, fuera de los que se encuentran en los murales pintados en las altas paredes y el techo curvo.
En total son por lo menos 30 murales que cuentan las historia de la fundación de Guadalajara tal y como la interpreta el artista (dicen quienes saben que los murales de Orozco son todavía más críticos que los de Diego Rivera, y a juzgar por lo que he visto puede ser que así sea). Hay imágenes fortísimas de cruces bañadas en sangre, obispos con rasgos demoníacos, el alfabeto y la religión traída de España sepultando las culturas originarias y una representación con referencia a los políticos de la época que se llama “Los demagogos” que causó la suspensión del pago de honorarios al artista.
Cuenta la historia que Orozco fue contratado por el Gobernador del Estado para que pinte el Hospicio, al sentirse insultado por “Los demagogos” suspende el pago quincenal, sin embargo Orozco continúa pintando hasta que termina su trabajo con un mural en reconocimiento al apoyo a la cultura realizado por el gobernador en el que aparece el propio gobernador, quien al verse retratado allí ordena que se abone la totalidad de lo adeudado al pintor. Luego de cobrar su deuda Orozco convierte lo que era la figura del gobernador en una especie de jarrón con rasgos de chivo y así llega el mural a nuestros días.
El mural de lo que sería la cúpula central, llamado “El hombre de fuego”, es una muestra magistral del uso de la perspectiva. Si uno se para viniendo del fondo del salón y mira para arriba el hombre esta tumbado, caído, en cambio si uno se para viniendo de la entrada del hospicio, el mismo hombre que antes estaba tumbado se ve erguido y de pie. Esto sumado a que la superficie es curva y Orozco lo pinto con una sola mano, colgando de una cuerda a 8 metros del piso.
Uno de los guías del Hospicio escribió un libro en el que recopila más de 300 testimonios de personas que vivieron en el Hospicio y sufrieron malos tratos y abusos de poder.
Vale la pena la visita y los martes la entrada es gratis, al igual que las visitas guiadas.
Observaciones:
- Es imposible, o por lo menos muy poco probable caminar más de cuatro cuadras sin cruzar una iglesia o ex convento.
- En la calle venden papas fritas, pero no saladas, las comen con salsa picante así que supongo que no le hace falta más sabor.
- También en la calle se pueden comprar frutas trozadas en unos vasos gigantes, por ejemplo sandía o granada (que son el alimento base de mi dieta por estos días), a las que le agregan sal, chile en polvo y limón (como a casi todo lo que se come!).
- Cuando se fundó la Ciudad de Guadalajara lo primero que se construyó fue la Catedral (que es verdaderamente imponente) y el Estado se quedó sin dinero para construir la Casa de Gobierno. En otros estados los ingresos públicos dependían de la venta del vino traído de España, pero en esta región el pueblo no tomaba vino porque aquí había tequila y mezcal (de hecho Guadalajara esta a una hora de el pueblo Tequila, de donde proviene la bebida por todos conocida), la solución que encontró el Estado fue gravar la venta y consumo de tequila y mezcal con un impuesto altísimo que hasta el día de hoy, desde la fundación de la ciudad está vigente. Y así fue como construyeron la Casa de Gobierno o el Palacio del Gobernador como se le llama acá. ¿les suena? En Argentina hay muchos ejemplos de situaciones similares.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Unos días medio grises y con un poco de lluvia.

El lunes amanece nublado y con lluvia, pinta ser un día fiacoso, me cuesta levantarme y decido pasar la mañana en el hostel escribiendo. Me quedé sin batería en la compu y no tengo como enchufarla así que me veo obligada a salir en busca de un adaptador. Pregunto en la recepción y se supone que a dos cuadras hay un lugar donde pueden tener, me pongo la campera para lluvia, el mp3 para que me haga compañía y arranco (todavía con mucha fiaca!). Resulta que donde me indicaron no tienen, pero me mandan a otro lugar, así paso tres locales y me referencian a un cuarto donde me dicen que seguro tiene. No encuentro el comercio en la esquina donde se supone debería estar así es que pregunto en una farmacia naturista a una señora de unos cincuenta años, que cuando me ve pone cara de susto y se persigna (¿?). Sé que mi cara de recién levantada a las 9,30 de la mañana en un día lluvioso y con fiaca no es lo más agradable, pero tampoco me imaginé que estuviera para el exorcismo! El episodio me causó mucha gracia y con la primera risa del día se empezó a disipar tanta pachorra.
Finalmente encontré el local que todavía estaba cerrado, voy a dar una vuelta para hacer tiempo, vuelvo a los quince minutos y sigue cerrado. El cartel dice que abre a las 10 hs., pero las diez mexicanas son más parecidas a las diez argentinas que a las diez inglesas. Voy a dar otra vuelta más y observo que son muchos los comercios cuyos carteles indican que abren a las diez y todavía no dan señales de vida.
La tercera es la vencida, vuelvo al negocio y encuentro la persiana a medio abrir, las luces apagadas y una señora que sale con mucho apuro, le pregunto si ya está abierto y me responde preguntándome que buscaba. Ve que es algo rápido y me hace pasar para venderme el adaptador, detrás de mí llega una pareja joven buscando algo no tan sencillo y les dice que aún no esta abierto. Ja!
Vuelvo al hostel después de la demora, un poco más despierta y ya sin la compañía de la lluvia. Cambio de planes, dejo la computadora enchufada cargando la batería y voy al correo a mandar unas postales.
Es imposible pasarse por alto el edificio del Correo de Mexico, es verde manzana y rosa fuerte (casi fluo); todo adentro también es de esos colores, las mesas, los buzones, las remeras de los empleados, etc. Muy moderno!
Doy una vuelta por el centro con la intensión de visitar algún museo, pero todos los museos están cerrados los lunes, así que refloto el plan A para el día de hoy y vuelvo al hostel a pasar la tarde escribiendo.
El hostel a primera hora de la tarde esta re-tranquilo, no hay casi nadie, disfruto del silencio y empiezo a organizar el blog (que obviamente ya lo vieron). Me llama Benjamín por teléfono para que vaya a conocer la casa y la habitación donde me voy a quedar hasta diciembre, quedamos que mañana a la mañana voy por allá y a la tardecita voy a conocer la sede de CODENI (la organización donde voy a estar colaborando con el taller de foto los sábados).
A la vuelta paso por el súper y me agarra otra de esas lluvias/baldazo por lo que llego al hostel empapada, a la hora pasa la lluvia y salgo a ver los edificios más importantes decorados e iluminados con los colores patrios anticipando los festejos de la Independencia.
La mañana siguiente también está gris y oscura, de a ratos llueve, me levanto, desayuno y salgo sin pensarlo mucho o me voy a quedar en la cama hasta el mediodía. Quedé con Benjamín a las once, pero todavía tengo tiempo así que paso por una plaza frente al Santuario donde hay una feria de artículos regionales del estado de Oaxaca, tejidos hermosos y gastronomía típica (quesos, café de Chiapas, golosinas y algunos platos más elaborados).
No pude resistirlo y me compré un bolsito tejido, que de todas formas necesitaba ya que solo tengo una mochila de 70 litros y una de 28 (excusas!!!), me salió baratísimo y es muy cómodo para salir sólo con la billetera y la cámara y evitar la mochila. Como todavía me pierdo haciendo cuentas del peso mexicano al dólar y de ahí al peso argentino estoy gastando muy poco, sólo compro comida o cosas muy necesarias, pero el bolso fue amor a primera vista, incluso resistí el primer impulso y seguí camino, pero soy débil y a la tarde tuve que volver a comprarlo.

martes, 15 de septiembre de 2009

Primer día en Guadalajara

El Domingo me levanté cansada por lo mal dormida, pero no me aguanté la curiosidad, desayuné algo de fruta y salí a ver la ciudad. En el centro de la Ciudad de Guadalajara los domingos no se puede circular en auto, es una normativa que se presentó a la ciudadanía con el slogan “Domingo en bicicleta”, y parece que fue bien recibido porque las calles estaban repletas de bicis, skates y rollers. En el hostel hay bicis gratis, pero esperaba sacar fotos y preferí caminar.
Aprovechando que el hostel esta rodeado de casas de cambio lo primero que hice fue cambiar euros por pesos mexicanos que ya se me estaban terminando (había cambiado unos dólares en el aeropuerto, pero supuse que el precio no sería favorable ahí así que esperaba encontrar una casa de cambio para el resto).
Vuelvo al hostel cargo agua, cámara de fotos, plano de la ciudad y campera para la lluvia (hay un huracán en el Pacífico y aquí llega en forma de baldazos de agua que caen del cielo) en la mochila y salgo.
A una cuadra tengo la Av. Javier Mina, veo en el plano de la ciudad que no muy lejos esta el Mercado Libertad y como me quedé con las ganas de sacar fotos en el Mercado Medellín (en la Colonia Roma, Ciudad de México) me voy para allá. En el camino me atrapa una ciudad moderna, limpia y ordenada (más tarde descubriría que lo de ordenada corre sólo para los domingos que la gente circula caminando o en bicicleta, el tránsito no es como en DF, pero de todas formas desordenado y ruidoso), me resulta más calurosa que el DF quizás porque no llueve tanto (se supone que a fin de mes termina la temporada de lluvias).
Cansada de levantarme sin saber que hora es me resigno y le compro un reloj a un vendedor ambulante (que hay por todos lados y venden de todo…como en Buenos Aires!).
Sigo caminando y otro vendedor ambulante ofrece Quina roja, un tronco marrón de unos diez centímetros de diámetro, que al quitarle la corteza revela su interior naranja y fibroso. Mientras retira la corteza con un machete que domina notablemente explica que un trozo del interior remojado toda la noche en un litro de agua se convierte en poderosa cura para la diabetes, úlcera, gastritis, exceso de ácido, colesterol, colitis nerviosa, alta presión, baja presión, limpia los riñones y purifica la sangre. Claro que no es mágico, hay que tomarlo durante 40 días por lo menos para poder observar algún resultado!
Llego al Mercado Libertad con gran desilusión ya que no encuentro lo que esperaba. Es un edificio monumental con infinidad de pasillos y puestos de venta de artículos electrónicos, ropa, calzado, CDs y DVDs truchos. Sus respectivos vendedores acosan a quienes se acercan a la voz de “Amiga ¿que buscas? A sus órdenes”. Tiene varios pisos (no los recorro todos) y en la planta baja esta el “Patio de comidas” con olores que van desde flores y fruta fresca hasta pollo, pescado, aceite quemado, carne asada, picante, encierro y transpiración.
Salgo del mercado a una plaza con una fuente bellísima y algunas esculturas, cruzo la plaza y camino por una peatonal hasta otra plaza más grande donde hay actividades organizadas por el municipio a través del Programa Pedagogía Urbana. Hay muchas carpas en la plaza y en cada una se puede encontrar algo interesante y divertido para cada edad.
Esta el Congreso de los niños, donde hacen propuestas, las debaten y aprenden sobre el funcionamiento interno del Congreso y la importancia de la participación; se cuentan cuentos para los más chiquitos y luego trabajan con algunas escenas; se realizan juguetes artesanales; experimentos con el agua y otras tantas actividades.
Personalmente me instalé en una carpa donde proyectaban documentales de realizadores locales. Vi “Últimas memorias vivas”, un documental con entrevistas a los revolucionarios zapatistas y a quienes continúan hoy su lucha bajo la misma consigna: “Tierra y libertad”, no muy distinto a las reivindicaciones de los mapuches de la Patagonia y otros pueblos silenciados por la historia oficial en la Argentina, agregando en la actualidad mayor énfasis en la defensa y protección de los recursos naturales, especialmente el agua. Le siguió “13 pueblos en defensa del agua, el aire y la tierra” realizado en el Estado de Morelos, me conmueven esas miradas tristes, y a veces perdidas, pero no vencidas, los ojos vidriosos con lágrimas que no llegan a caer, rostros cubiertos de surcos y sonrisas de pocos dientes que gritan “¡Zapata vive, la lucha sigue!” y reflexiono sobre mi propia realidad y como hacer para que mi viaje no sea un paseo descomprometido “para ver gente pobre”. A la tarde vuelvo al hostel a escribir un rato, cae la lluvia de todas las tardes y salgo a que aclare mis pensamientos.